1. Haré volver la cautividad.
"Yo cambié la
suerte de Judá y Jerusalén" (BJ). "Volver la cautividad" podría describir un
retorno de un cautiverio literal o puede usarse metafóricamente como en la
traducción de la BJ, para describir un retorno general a la prosperidad (ver
com. Sal. 14: 7; la Introducción al Sal. 126, t. III, p. 924). Si el libro de
Joel fue escrito poco antes del cautiverio babilónico (ver p. 23), probablemente
haya aquí una referencia al retorno desde aquel país. Esta expresión es común en
Jeremías, y así se la aplica (cap. 30: 3, 18; 31: 23; 32: 44; 33: 7).
La
descripción del regreso corresponde con la forma en que se hubieran cumplido las
promesas de Dios si la nación de Israel hubiese cooperado con el Señor (ver pp.
29-32; com. Eze. 37: 1). La prosperidad de Israel habría levantado la enemistad
de las naciones, que aquí se representan como reunidas por Dios en el valle de
Josafat. La predicción es paralela con la de Eze. 38, donde Gog y los suyos son
representados como llevados contra Jerusalén, y allí son juzgados (cf. Zac. 14:
1-3). La aplicación de esta profecía al futuro debe hacerse de acuerdo con la
revelación del NT (ver com. Eze. 38: 1; p. 32).
2. Valle de Josafat.
Este nombre sólo aparece aquí, pero
en el tiempo de Eusebio (siglo IV d. C.) fue aplicado al vallé del Cedrón, la
depresión que se halla entre Jerusalén y el monte de los Olivos, al este de
Jerusalén. Sin embargo, no hay pruebas de que ese valle se llamara así
antiguamente. El nombre parece haberse elegido debido a su significado. Josafat
significa "Yahweh ha juzgado" o "Yahweh juzga". Ver CS 35.
Algunos han
tratado de identificar este valle con el valle de Beraca, escenario de la
victoria de Judá sobre las fuerzas unidas de Amón, Moab y del monte de Seir (2
Crón. 20: 1-30). Sin embargo, ese valle estaba en el desierto de Tecoa (2 Crón.
20: 20), pueblo a unos 16 km al sur de Jerusalén, probablemente el Wadi
el-Arrub, al sur de Tecoa. La distancia que separa este lugar de Jerusalén
parece oponerse a identificar el valle de Beraca con el valle de Josafat.
Entraré en juicio.
Heb. shafat , que, en la forma en que aquí
aparece significa "entrar en ti una controversia legal". Shafat es la última
parte del nombre de Josafat.
El pueblo de Israel, reanimado
espiritualmente y cooperando con el plan de Dios, habría disfrutado del favor y
de la protección del cielo. Las bendiciones prometidas en el tiempo del éxodo
(Deut. 28: 1-14) habrían encontrado un tardío cumplimiento. La nación Judía se
habría transformado en una maravilla de prosperidad y hubiera causado la
conversión de multitudes al Dios verdadero. Con el aumento de sus habitantes,
Israel habría extendido sus fronteras hasta abarcar el mundo (ver PVGM 272).
Naturalmente, un programa tal habría despertado la ira de las naciones paganas.
Bajo el liderazgo de Satanás esas naciones se habrían unido para aplastar al
Estado que prosperaba; pero Dios hubiera intervenido (ver p. 32).
Debido
al fracaso de los judíos, sabemos que, en principio, estas predicciones se
cumplirán en la iglesia cristiana (ver com. Eze. 38: 1). El conflicto que aquí
se describe se transformará en un intento desesperado de Satanás, en la última
hora de la tierra, para destruir a la verdadera iglesia de Dios. "Así como él
[Satanás] influyó en las naciones paganas para que destruyeran a Israel, así
también en el futuro cercano instigará a los poderes impíos de la tierra para
que destruyan al pueblo de Dios" (9T 231; cf. 5T 524; CS 714; 2JT 373-374; 3JT
46). Pero Dios intervendrá otra vez en favor de su pueblo, y en la segunda
venida de Cristo destruirá a los impíos (Apoc. 19: 19- 21), y 1.000 años más
tarde los aniquilará del todo (Apoc. 20: 9-15).
3. Echaron suertes.
Parece que en las guerras antiguas era
común distribuir a los esclavos echando suertes (cf. Abd. 11; Nah. 3: 10).
4. ¿Qué tengo yo con vosotras?
Literalmente, "¿qué sois para mí?" (BJ). Dios se identifica con su
pueblo (Mat. 10: 40; 25: 40, 45).
Tiro.
Tiro y Sidón eran dos
importantes ciudades fenicias (ver t. II, pp. 69-71; com. Eze. 26: 2; 28: 21).
5. Habéis llevado mi plata.
Dios
consideraba como suya la riqueza de Israel.
6. Vendisteis.
Los fenicios y los filisteos 973 eran
famosos comerciantes de esclavos (Eze. 27: 13).
Para alejarlos de su
tierra. Se expresa aquí el resultado. Debido al tráfico de esclavos de los
fenicios y los filisteos, en primer lugar con motivos de lucro, los judíos
habían sido muy esparcidos.
7. Levantaré.
Literalmente, "suscito", "despierto".
8. Sabeos.
Gente que vivía en el sudoeste de Arabia,
famosa como comerciantes.
9. Naciones.
Heb. goyim, "gentiles", "pueblos". En los vers. 9-17 se vuelve al tema
del vers. 2. Este se amplía y se presenta gráficamente. Como se hizo notar en el
com. del vers. 2, que se trate de un conflicto literal depende de cómo se
hubieran desarrollado los acontecimientos si la nación de Israel hubiese
cumplido la misión que Dios le dio. Su aplicación a los últimos días debe
hacerse depender de la información proporcionada por escritores inspirados
posteriores, quienes han presentado cómo se cumplirán con el Israel espiritual
los sucesos que podrían haberse cumplido en el Israel literal (ver com. vers. 2;
pp. 37-38).
Proclanliad guerra.
Heb. qadash, literalmente "
"santificar" " (ver com. cap. 1: 14).
Despertad.
Heb. 'ur ,
"despertar", "incitar". En cuanto a una aplicación, en términos generales, de
excitar a los poderes impíos de la tierra para que destruyan al pueblo de Dios,
ver com. vers. 2. Los impíos serán otra vez incitados al fin del milenio, cuando
Satanás fortalezca "a los débiles y a todos les" infunda "su propio espíritu y
energía" para que ataquen la nueva Jerusalén (CS 721; ver com. Isa. 24: 22).
Los expositores adventistas han visto generalmente en esta profecía un
presagio no sólo de los acontecimientos culminantes relacionados con el gran día
del Señor, sino también de los sucesos bélicos de los días finales de la
historia de la tierra. El retiro gradual del Espíritu de Dios en estos últimos
días abre el camino para un incremento de la actividad satánica con el propósito
de inducir a los hombres a su mutua destrucción. Este proceso llegará a su
clímax precisamente poco antes de la venida del Hijo del Hombre en las nubes del
cielo.
10. Azadones.
Las fuerzas de
la economía y de la industria de las naciones se dedicarían a fines bélicos.
Fuerte.
Heb. gibbor , "valiente", "guerrero".
11. Juntaos.
En cuanto al
cumplimiento condicional en el Israel literal, ver p. 32. En cuanto al
cumplimiento en el Israel espiritual, ver com. vers. 2.
De alrededor.
Este complemento circunstancial se aplica a los paganos (Heb. goyim,
"naciones"), y no se relaciona con "juntaos".
Fuertes.
Heb.
gibborim , que podría traducirse "guerreros" (ver com. vers. 10).
12. Despiértense las naciones.
Ver
com. vers. 9.
Valle de Josafat.
Ver com. vers. 2.
Juzgar.
Ver p. 32 y com. vers. 2.
13. La mies está ya madura.
Sin duda se usan dos símbolos
para describir el juicio que caerá sobre las naciones: (1) La cosecha de los
granos, y (2) la recolección y el aplastamiento de las uvas. Algunos piensan que
sólo se trata de sin símbolo: que la hoz representa a una herramienta para
podar, y la cosecha, la vendimia, la cual se llevaba a cabo alrededor de
septiembre. Compárese con la descripción de la cosecha que hace Juan en Apoc.
14: 14-20.
14. Decisión.
Heb.
jaruts , palabra que admite varias definiciones posibles. El contexto debe
decidir el significado que se elija en determinado caso. La raíz de jaruts es
jarats , que significa "decidir", "determinar", "establecer", "fijar". Jaruts
puede ser el participio pasivo de jarats , y por lo tanto puede significar
"decisión" en el sentido de que la suerte de las naciones impías está siendo
decidida. Sin embargo, debe advertirse que la "decisión" " a la que aquí se hace
referencia es a la de Jehová como juez (ver com. vers. 2, 12), y no a la del
pueblo que está siendo juzgado. En otras palabras: su tiempo de gracia ya ha
terminado. Ahora es el "día de Jehová" (ver com. Isa. 13: 6). La LXX traduce
valle del "castigo" o de la "venganza" .
Jaruts es también adjetivo y
sustantivo, y como tales puede significar "oro" (Sal. 68: 13), "foso" " (Dan. 9:
25, BJ), "diligentes" (Prov. 10: 4), "que tiene un corte" " (traducido
"mutilado" , Lev. 22: 22), o "trillo" " (Isa. 28: 27). De estas definiciones
sólo "trillo" concuerda con el contexto. Varios prefieren esta traducción. El
cuadro, pues, sería el de un valle en el cual los impíos están siendo trillados.
Las palabras "valle de la decisión" con frecuencia se han usado para
describir a las multitudes de la tierra cuyo destino está en la balanza. Aunque
pueden tomarse y aplicarse 974 así, debiera recordarse que ésta no es la
aplicación original del texto, la que tuvo en cuenta la Inspiración.
15. Se oscurecerán.
Respecto a las
señales físicas que acompañarán el día del Señor, ver com. cap. 2: 10; cf. PE
41.
16. Rugirá desde Sión.
Cf. Amós
1: 2; ver com. Eze. 38: 18-23.
Temblarán.
Respecto a la
aplicación futura de estas profecías, ver com. vers. 2; cf. Apoc. 16: 17- 18; PP
354.
Esperanza.
Heb. majaseh , "un refugio", "un resguardo". El
castigo que cae sobre los enemigos de Judá significa liberación para el pueblo
de Dios. Así será cuando, bajo la in fluencia de Satanás, las naciones impías de
la tierra traten de destruir al fiel remanente de Dios (Apoc. 13: 15). Dios
intervendrá para liberar a su pueblo (ver PE 272-273).
17. Conoceréis.
Debido a las desgracias que habían
sobrevenido a la nación judía, muchos habían sido inducidos a poner en duda los
propósitos misericordiosos de Dios. Pero el Señor declaró que mostraría su gran
poder en la liberación de su pueblo. De esa manera su carácter y designio
bondadoso serían plenamente defendidos ante los habitantes de la tierra (ver
com. Eze. 6: 7; 38: 23; cf. Eze. 39: 22, 28).
No pasarán más por ella.
Es decir, con malos propósitos. Por supuesto, eran bienvenidos los
extraños que se habían unido con el Señor (Isa. 56: 6). El designio de Dios era
que "todos", vinieran regularmente a adorar delante de él (Isa. 66: 23).
El cuadro es el de la Jerusalén que podría haber sido (ver com. Isa. 65:
17). Cuando la nueva Jerusalén descienda del cielo de Dios (Apoc. 21: 2),
Satanás y la inmensa hueste que lo acompaña tratarán de irrumpir en la santa
ciudad; pero perecerán en ese intento (Apoc. 20: 9).
18. Sucederá.
En los vers. 18-21 se describen las
condiciones que hubieran imperado después de que cayera el castigo sobre los
enemigos de Jerusalén, si Israel hubiese sido fiel. La descripción es paralela
con la que se presenta en Eze. 40 a 48 y Zac. 14. Finalmente se hubiera
efectuado una completa renovación de la tierra (ver com. Isa. 65: 17; Eze. 38:
1; 40: 1; pp. 32-33).
Una fuente.
Cf. Eze. 47: 1-12. Respecto a
los principios de interpretación, ver com. Eze. 40: 1.
Valle de Sitim.
O "valle de las Acacias" " (BJ). Había un Sitim en Moab, frente a
Jericó, donde acamparon los hijos de Israel antes de entrar en la tierra de
Canaán (Núm. 25: 1; cf. Núm. 22: 1). Sin embargo, es dudoso que ésta sea la
región que aquí se menciona. Una comparación con Eze. 47: 1-12 sugiere que este
valle quizá era el del Cedrón con sus "wadis".
19. Desierto asolado.
Ver com. vers. 18.
Por la
injuria.
Ver p. 32.
20. Para
siempre.
La estadía anterior en Canaán, aunque tenía el propósito de ser
permanente, fue interrumpida debido al fracaso del pueblo que no cooperó con el
programa del cielo. La gente había construido casas, pero moraban en ellas
extraños. Ahora se les ofrecía otra vez la promesa de una residencia permanente
(ver com. Isa. 65: 21). Si la disciplina del cautiverio hubiese logrado el fin
que tenía y los repatriados hubiesen continuado llevando a cabo el propósito
divino, su residencia hubiera sido permanente.
21. Limpiaré.
Heb. naqah , "absolver", "eximir del
castigo". En el plan evangélico, una absolución tal es posible únicamente porque
al pecador se le adjudica Injusticia de Cristo (ver com. cap. 2: 23).
COMENTARIOS DE ELENA G. DE WHITE T4
CBA LIBRO DE JOEL CAPÍTULO 3
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