Lección 2 | Jueves 6 de abril
CADA SEMILLA PRODUCE UNA COSECHA
En Apocalipsis 14 hay dos cosechas. La cosecha de grano dorado representa a los justos, y la cosecha de uvas sangrientas representa a los injustos, o perdidos. Ambas cosechas están completamente maduras. Cada semilla sembrada está completamente madura.
Lee Apocalipsis 14:17 al 20. ¿Qué significa la expresión “el gran lagar de la ira de Dios”? Ver también Apocalipsis 14:10; 15:1; y 16:1.
Apo 14:17 Salió otro ángel del templo que está en el cielo, teniendo también una hoz aguda.
Apo 14:18 Y salió del altar otro ángel, que tenía poder sobre el fuego, y llamó a gran voz al que tenía la hoz aguda, diciendo: Mete tu hoz aguda, y vendimia los racimos de la tierra, porque sus uvas están maduras.
Apo 14:19 Y el ángel arrojó su hoz en la tierra, y vendimió la viña de la tierra, y echó las uvas en el gran lagar de la ira de Dios.
Apo 14:20 Y fue pisado el lagar fuera de la ciudad, y del lagar salió sangre hasta los frenos de los caballos, por mil seiscientos estadios.
Apo 14:10 él también beberá del vino de la ira de Dios, que ha sido vaciado puro en el cáliz de su ira;(D) y será atormentado con fuego y azufre delante de los santos ángeles y del Cordero;
Vi en el cielo otra señal, grande y admirable: siete ángeles que tenían las siete plagas postreras; porque en ellas se consumaba la ira de Dios.
Apo 15:1 Vi en el cielo otra señal, grande y admirable: siete ángeles que tenían las siete plagas postreras; porque en ellas se consumaba la ira de Dios.
Apo 16:1 Oí una gran voz que decía desde el templo a los siete ángeles: Id y derramad sobre la tierra las siete copas de la ira de Dios.
“Y del altar salió aún otro ángel que tenía poder sobre el fuego” (Apoc. 14:18). Este es el ángel que manda los fuegos del juicio final de Dios. La cosecha está madura. El pecado llegó a su límite. La rebelión ha cruzado la línea de la misericordia de Dios. Aunque ha habido cosas muy malvadas y perversas, van a empeorar aún más antes de que todo termine. Un Dios amoroso ha hecho todo lo posible por nosotros, que incluía ofrecerse a sí mismo en la Cruz como sacrificio por nuestro pecado. “Al que no tenía pecado, Dios lo hizo pecado por nosotros, para que nosotros llegásemos a ser justicia de Dios en él” (2 Cor. 5:21; ver también Gál. 3:13).
¿Qué más podría haber hecho Dios más allá de esa Cruz? No hay nada más que la gracia pueda hacer para redimir a quienes han rechazado repetidamente al Espíritu Santo.
Este es el urgente mensaje profético de Apocalipsis 14. Todas las semillas han dado frutos. El grano está completamente maduro, y las uvas están completamente maduras. El pueblo de Dios revela su imagen de gracia, compasión, misericordia y amor ante el Universo. Los hijos del maligno revelan codicia, lujuria, celos y odio. El carácter de Jesús se revela en un grupo; y el carácter de Satanás, en el otro.
El Universo verá en el pueblo de Dios una revelación de justicia que tal vez ninguna generación anterior haya presenciado. En contraste con la justicia de Cristo revelada en su pueblo, el Universo verá los resultados completos de la rebelión contra Dios. La maldad, el mal, el pecado y la iniquidad se exhibirán plenamente ante los hombres y los ángeles. El contraste entre el bien y el mal, lo bueno y lo malo, la obediencia y la desobediencia, será evidente para todo el Universo, tanto para la humanidad como para los ángeles.
¿En qué medida puedes discernir el contraste entre el bien y el mal? ¿Por qué es importante que lo hagamos? (Ver Heb. 5:14).
Comentarios
Publicar un comentario