Miércoles 31 de enero | Lección 5
"HA FALLADO PARA SIEMPRE SU PROMESA?
Lee Salmo 77. ¿Qué experiencia está viviendo el autor?
A Dios clamé, y él me escuchará.
Sal 77:2 Al Señor busqué en el día de mi angustia;
Alzaba a él mis manos de noche, sin descanso;
Mi alma rehusaba consuelo.
Sal 77:3 Me acordaba de Dios, y me conmovía;
Me quejaba, y desmayaba mi espíritu. Selah
Sal 77:4 No me dejabas pegar los ojos;
Estaba yo quebrantado, y no hablaba.
Sal 77:5 Consideraba los días desde el principio,
Los años de los siglos.
Sal 77:6 Me acordaba de mis cánticos de noche;
Meditaba en mi corazón,
Y mi espíritu inquiría:
Sal 77:7 ¿Desechará el Señor para siempre,
Y no volverá más a sernos propicio?
Sal 77:8 ¿Ha cesado para siempre su misericordia?
¿Se ha acabado perpetuamente su promesa?
Sal 77:9 ¿Ha olvidado Dios el tener misericordia?
¿Ha encerrado con ira sus piedades? Selah
Sal 77:10 Dije: Enfermedad mía es esta;
Traeré, pues, a la memoria los años de la diestra del Altísimo.
Sal 77:11 Me acordaré de las obras de JAH;
Sí, haré yo memoria de tus maravillas antiguas.
Sal 77:12 Meditaré en todas tus obras,
Y hablaré de tus hechos.
Sal 77:13 Oh Dios, santo es tu camino;
¿Qué dios es grande como nuestro Dios?
Sal 77:14 Tú eres el Dios que hace maravillas;
Hiciste notorio en los pueblos tu poder.
Sal 77:15 Con tu brazo redimiste a tu pueblo,
A los hijos de Jacob y de José. Selah
Sal 77:16 Te vieron las aguas, oh Dios;
Las aguas te vieron, y temieron;
Los abismos también se estremecieron.
Sal 77:17 Las nubes echaron inundaciones de aguas;
Tronaron los cielos,
Y discurrieron tus rayos.
Sal 77:18 La voz de tu trueno estaba en el torbellino;
Tus relámpagos alumbraron el mundo;
Se estremeció y tembló la tierra.
Sal 77:19 En el mar fue tu camino,
Y tus sendas en las muchas aguas;
Y tus pisadas no fueron conocidas.
Sal 77:20 Condujiste a tu pueblo como ovejas
Por mano de Moisés y de Aarón.
Salmo 77 comienza con una súplica de ayuda a Dios llena de lamentos y dolorosos recuerdos del pasado (Sal. 77:1-6). Todo el ser del salmista se dirige con luto a Dios. Se niega a dejarse consolar por cualquier alivio que no provenga de Dios.
No obstante, recordar a Dios parece intensificar su angustia: “Me acordaba de Dios y gemía” (Sal. 77:3). La palabra hebrea hamá (‘gemir’) a menudo representa el rugido de las aguas embravecidas (Sal. 46:3). Del mismo modo, todo el ser del salmista se encuentra en un estado de intensa inquietud.
¿Cómo puede el recuerdo de Dios producir sentimientos tan fuertes de angustia? Una serie de preguntas inquietantes delatan la causa de su angustia (Sal. 77:7-9): ¿Ha cambiado Dios? ¿Es posible que Dios traicione su Pacto?
El marcado contraste entre los actos salvíficos de Dios en el pasado y su aparente ausencia en el presente hace que el salmista se sienta abandonado por Dios. Si Dios ha cambiado, entonces el salmista no tiene esperanza, una conclusión que se esfuerza por rechazar.
Mientras tanto, el salmista no puede dormir porque el Señor no lo deja dormir (Sal. 77:4). Esto nos recuerda a otros personajes bíblicos cuyo insomnio fue utilizado providencialmente por Dios para prosperar sus propósitos (Gén. 41:1-8; Est. 6:1; Dan. 2:1-3). La larga noche de insomnio hace que el salmista considere los pasados actos de liberación del Señor, pero con nueva determinación (Sal. 77:5, 10).
La seguridad que el salmista recibe de Dios no consiste en explicaciones sobre su situación personal, sino en una confirmación de la fidelidad y la confianza de Dios (como Job). Se anima al salmista a esperar en el Señor con fe, sabiendo que él es el mismo Dios que realizó milagros en el pasado de Israel (Sal. 77:11-18). El salmista también se da cuenta de que “no se vieron tus huellas” (Sal. 77:19), reconociendo la guía de Dios, incluso en situaciones en las que su presencia no es obvia a los ojos humanos. El salmista reconoce que Dios se revela y se oculta simultáneamente, y por eso ofrece alabanzas a las sendas misteriosas y soberanas del Señor.
Piensa en momentos pasados en los que el Señor actuó en tu vida. ¿Cómo puede ayudarte esa verdad a afrontar lo que se te presenta ahora?
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