1. Moab.
Este país estaba ubicado en la meseta
al este del mar Muerto. Su pueblo estaba emparentado con los hebreos, pues eran
descendientes de Lot, sobrino de Abrahán (Gén. 19: 36-37). Cuando Israel se
estableció en Canaán, el territorio de Moab estaba entre el río Arnón y el
arroyo de Zered. La tribu de Rubén ocupo el territorio que quedaba al norte.
David convirtió a Moab en parte de su imperio (2 Sam. 8: 2, 11-12; 1 Crón. 18:
2, 11). El reino septentrional de Israel intentó mantener cierto control sobre
Moab (ver com. 2 Rey. l: l). Al final del reinado de Acab, cuando Ocozías ocupó
el trono, un cierto Mesa se rebeló contra Israel, independizó a Moab (2 Rey. 3:
4-27) e incluyó en sus territorios los que anteriormente habían sido de la tribu
de Rubén. Grabó el relato de sus conquistas en una estela de basalto negro que
hoy se conoce con el nombre de la Piedra Moabita. Esta 544 inscripción fue
descubierta en 1868 en Dibón, y se encuentra ahora en el museo del Louvre en
París (ver la Nota Adicional de 2 Rey. 3). Moab siguió siendo un reino
independiente hasta que el Asia occidental fue conquistada por los asirios en el
siglo VIII a. C.
En el cap. 48 se presenta una lista de ciudades
moabitas que habrían de sufrir los azotes de los babilonios. De los 25 lugares
que se enumeran, se puede identificar con relativa seguridad a 2l. Solo 4 de
estos lugares están fuera de los territorios al norte del Arnón que fueron
asignados a Israel cuando éste se estableció en Canaán, y que le fueron quitados
en ocasión de la revuelta de Moab en el siglo IX a. C. En verdad, Mesa afirma
haber tomado de los israelitas 11 de los lugares mencionados en este capítulo.
También afirma haber añadido 100 aldeas a su territorio (ver Nota Adicional de 2
Rey. 3). Parecería que Jeremías describiera en especial los castigos de Dios
sobre los moabitas que vivían en los territorios que antes habían pertenecido a
la tribu de Rubén.
Nebo.
No debe confundirse con el dios
babilónico (Isa. 46: l) ni con el monte Nebo (Deut. 32: 49). Aquí Nebo se
refiere a una ciudad, como también en Núm. 32:38, quizá cerca del monte Nebo, al
este del extremo norte del mar Muerto. En la Piedra Moabita, Mesa dice haber
tomado esta ciudad de manos de los israelitas (ver Nota Adicional de 2 Rey. 3).
Quiriataim.
Lugar ubicado a unos 11 km. al norte del río Arnón,
conocido ahora con el nombre de el-Qereiyát . Mesa le da el nombre de Qiryathan
y afirma haberlo construido (ver Nota Adicional de 2 Rey. 3).
Misgab.
No se conoce la ubicación de Misgab. La palabra hebrea aparece también
en Isa. 25: 12 donde la RVR la traduce "fortaleza".
2. Hesbón.
Ciudad situada a unos 24 km. al noreste del
extremo norte del mar Muerto. Había estado en el territorio de Rubén, tomado de
Sehón el amorreo cuando Israel entró en Canaán (Núm. 32: 33, 37). La Hesbón de
los días de Jeremías no estaba más en poder de los judíos. Excavaciones
efectuadas en Tell Hesbán han permitido descubrir ruinas del tiempo de Jeremías
y de la antigua monarquía, cuando Hesbón tenía renombre por sus estanques (Cant.
7: 4).
Maquinaron.
El hebreo dice bejeshbon jashabu , especie de
juego de palabras muy característico de la poesía hebrea, e ilustración del
estilo poético de esta profecía. En el vers. 2 parece indicarse que en tiempos
de Jeremías Hesbón fue el centro de un complot contra los moabitas.
Madmena.
Aunque no hay seguridad, es posible que se trate de lo
que hoy se denomina Kirbet Dimneh , a unos 15 km. al este de la lengua de tierra
que se introduce en el mar Muerto por el lado orienta¡.
3. Horonaim.
No se conoce la ubicación de esta ciudad.
Corresponde con la Hauronen que Mesa afirma haber tomado de Israel por orden de
Quemos (ver la Nota Adicional de 2 Rey. 3).
5. La subida de Luhit.
Sin duda era algún camino cuya
ubicación hoy se desconoce. Es posible que pasara por uno de los muchos wadis, o
angostos lechos de ríos que cortaban la meseta de Moab y bajaban al mar Muerto.
Horonaim.
Ver com. vers. 3.
6. Retama.
Heb. 'aro'er , de la raíz 'arar , "desnudar".
Es probable que se refiera al junípero o tamarisco, que en su desnudez era un
símbolo apropiado de la desolación de los refugiados moabitas. Hay aquí un sutil
juego de palabras que no puede traducirse. La palabra hebrea traducida como
"retama" es también el nombre de Aroer, una de las ciudades de Moab (vers. 19).
La LXX dice "asno silvestre", como si la palabra hebrea fuera 'arod , y no
'aro'er . La BJ ha seguido esta traducción y emplea la palabra "onagro". La
figura de un onagro errante es ciertamente apropiada para los refugiados
desvalidos que van por el desierto. Sin embargo, debe notarse que en el cap. 17:
6, la LXX traduce la palabra hebrea casi idéntica ´ ar´ar como "tamarisco
silvestre" y la BJ traduce "tamarisco', por lo cual lo más seguro es conservar
el sentido del hebreo.
7. En cautiverio.
Se describe aquí a los ídolos de los pueblos cautivos que son llevados
al exilio junto con sus devotos (cf. Isa. 46: 1-2).
8. El valle.
El "valle" y "la llanura" se refieren a los
dos rasgos geográficos más notables del territorio moabita, el lado oriental del
valle del Jordán frente al mar Muerto, y la gran meseta de Transjordania que se
eleva a más de 1.000 m sobre el valle y se extiende hasta el desierto de Arabia.
10. Maldito.
Al pronunciarse una
maldición sobre cualquiera a quien Dios ha elegido como vengador suyo, y que
pudiera abstenerse 545 de ejecutar los castigos designados por Dios, se recalca
en forma poética que los acontecimientos predichos son inevitables.
11. Quieto estuvo.
Jeremías compara
a Moab con el vino que nunca ha sido cambiado de recipiente y por lo tanto ¡la
absorbido el sabor característico de su sedimento. Aunque su país había sufrido
varios reveses políticos, el hecho de que los moabitas nunca hubieran sido
sometidos a una deportación a un país extraño (no habían sido vaciados "de
vasija en vasija"), puede haber impedido en cierto modo que absorbieran nuevas
impresiones en cuanto al mundo y nuevas perspectivas acerca de la vida. De ese
modo su localismo culminó en una satisfacción propia nacional que resultó en su
caída.
13. Se avergonzará Moab de Quemos.
Un contraste muy vívido con las jactanciosas afirmaciones de Mesa (ver
la inscripción de la Piedra Moabita, traducida en la Nota Adicional de 2 Rey.
3).
Se avergonzó de Bet-el.
Referencia al culto idolátrico del
becerro, que estableció Jeroboam en Bet-el y que se generalizó durante la
historia del reino septentrional (1 Rey. 12:26-29). Así como Israel había
comprobado que sus ídolos eran impotentes, también lo comprobaría Moab.
18. Moradora hija de Dibón.
Es
decir, los habitantes de Dibón. Compárese con las expresiones "hija de Egipto"
(cap. 46: 11), "hija de Judá" (Lam. 1: 15), "hija de Sión'" (Lam. 2: 10). Dibón,
hoy la aldea de Dibán, era una ciudad importante en el sur del territorio que
antes había ocupado Rubén, a unos 5 km. al norte del río Arnón y a unos 19 km.
al este del mar Muerto. Estaba sobre la gran ruta del rey, dérek hammélek (el
"camino" de Deut. 2: 27), que en tiempos antiguos era la principal ruta que iba
de norte a sur atravesando la Transjordania. Los israelitas acamparon en Dibón
yendo rumbo a Canaán (Núm. 33: 45-46). Más tarde la ciudad fue reconstruida por
los gaditas (Núm. 32: 34), y más adelante fue incluida en los territorios de
Rubén. En la Piedra Moabita, Mesa registra que Dibón estaba entre las ciudades
que tomó de los israelitas y añadió al reino de Moab (ver Nota Adicional de 2
Rey. 3).
19. Camino.
Heb. dérek .
Es probable que se refiera al "camino del rey", a cuya vera estaba Aroer. Esta
carretera era la ruta normal que tomarían los refugiados moabitas al huir de los
babilonios que se aproximaban desde el norte. Con gran ironía, Jeremías exhorta
a los pobladores de Aroer a que salgan a contemplar a sus compatriotas que huyen
ante los invasores hacia el sur, por el camino.
Aroer.
Podría
tratarse de una aldea llamada hoy Arair, a unos 5 km. al sureste de Dibón, de la
que se dice que Mesa arrebató de los israelitas (ver la Nota Adicional de 2 Rey.
3), o de un lugar que no se ha identificado aún, cerca de Rabá (los. 13: 25);
pero no se trata de la Aroer de 1 Sam. 30: 28.
20. En Arnón.
Es decir, "junto al Arnón". El Arnón era el
río más importante de Moab. Corría hacia el oeste, desde la meseta hasta el mar
Muerto, y señalaba la frontera sur de la tribu de Rubén cuando Israel dominaba
ese territorio.
21 . La tierra de la
llanura.
Ver com. vers. S.
Holón.
Es posible que se
trate de un lugar vecino a Medeba, aunque su ubicación exacta no es conocida.
Jahaza.
Se cree que corresponde con lo que hoy se llama Yalul,
cerca de Medeba, en lo que fue la parte norte de Rubén. En este lugar Israel
derrotó a Sehón, rey de los amorreos (Núm. 21: 23-24). La Piedra Moabita la
llama Jahaz y dice que allí tuvieron los israelitas su cuartel general durante
la guerra con Mesa. El rey moabita se jacta de que Quemos, su dios, expulsó a
los israelitas de Jahaz (ver la Nota Adicional de 2 Rey. 3).
Mefaat.
Quizá lo que hoy se llama Tell Yawah, a unos 11 km. al sur de
Rabat-amón.
22. Dibón.
Ver com.
vers. 18.
Nebo.
Ver com. vers. 1.
Bet-diblataim.
No hay seguridad de que deba identificarse con Almón-diblataim, donde
Israel acampó antes de entrar en Canaán (Núm. 33: 46). Se cree que este lugar
corresponde con lo que es hoy Kirbet Deleilat es-Serakiyeh, en lo que había sido
la parte central del territorio de Rubén. En la Piedra Moabita, Bet-diblataim
aparece como Bethdiblathen . Mesa afirma haberla construido (ver la Nota
Adicional de 2 Rey. 3). Kirbet Deleilat es-Serakiyeh está a unos 11 km. al sur
de Medeba.
23. Quiriataim.
Ver com.
vers. 1.
Bet-gamul.
Lo que hoy se llama Kirbet el Yumeil, a unos
11 km. al este de Dibón, en lo que antiguamente fue la parte sur del territorio
de Rubén.
Bet-meón.
Este lugar hoy lleva el nombre de Maín, y se
halla a unos 7 km. al suroeste de 546 Medeba. Corresponde con Baal-meón, que
edificaron los rubenitas (Núm. 32: 37-38), y también Bet-baal-meón (Jos. 13:
15-2 1). En la Piedra Moabita, Mesa usa los dos nombres y dice que él construyó
la ciudad (es decir, la reconstruyó; ver la Nota Adicional de 2 Rey. 3). La
extensión de las ruinas que hoy se ven indica que debe haber sido una ciudad
importante. Junto con otras dos ciudades, Ezequiel la denomina "tierras
deseables" (Eze. 25: 9). La afirmación de que los rubenitas cambiaron su nombre
(Núm. 32: 38) podría explicar las diversas formas en que aparece. Evidentemente
se hizo un cambio del nombre pagano, Baal-meón, "baal de habitación", a Bet-
meón, "casa de habitación". De allí en adelante parece que a veces se combinaron
el nombre antiguo y el nuevo formando el nombre Bet-baal-meón, "casa del baal de
habitación".
24. Queriot.
No se ha
identificado aún este lugar. En la Piedra Moabita aparece como una ciudad al
cual Mesa llevó a Orel, comandante israelita de Atarot, "arrastrándolo delante
de Quemos en Queriot" (ver la Nota Adicional de 2 Rey. 3).
Bosra.
Es probable que corresponda con la aldea de Betser que Mesa afirma haber
reconstruido (ver la Nota Adicional de 2 Rey. 3). Se desconoce su ubicación. No
debe confundirse con la Bosra de Isa. 63: 1 y Jer. 49: 13, que se encontraba en
Edom.
27. Lo tomaran entre ladrones.
Ser tomado por ladrón es un motivo de mucha vergüenza (cap. 2: 26). Aquí
el profeta emplea la misma figura como una pregunta retórica, probablemente con
el propósito de hacer resaltar lo irracional que había sido Moab al despreciar a
Israel.
30. Yo conozco.
Esta frase
es enfática en el hebreo. Es una firme promesa para el despreciado y oprimido
Israel de que el Señor conoce la verdad a pesar del orgullo y de la jactancia
del hombre, que Israel dice haber "oído" (vers. 29).
31. Kir-hares.
Se cree que corresponde con Kir-hareset de 2
Rey. 3: 25 y de Isa. 16: 7, lugar que hoy se denomina Kerak, en la parte sur de
Moab. Después de hablar de las ciudades que antes habían pertenecido a Israel,
Jeremías menciona un lugar que era realmente moabita. Kir-hares era una de las
ciudades más importantes de Moab. Aquí Mesa se refugió de los asediadores
israelitas, y sacrificó a su hijo mayor en holocausto sobre las murallas de la
ciudad (2 Rey. 3: 25-27).
32. Sibma.
Lugar situado cerca de Hesbón, cuya ubicación exacta se desconoce. El
lugar era conocido por sus viñedos.
Jazer.
No hay certeza en
cuanto a la ubicación de Jazer, pero se cree que habría estado al oeste o al
noroeste de Rabat-amón. Es posible que se la mencione aquí para destacar hasta
qué punto las conquistas moabitas habían penetrado hacia el norte en territorio
israelita.
33. Canción.
La alegre
canción de la vendimia, cuando se pisaban las uvas en el lagar.
34. Eleale.
Hoy tiene el nombre de
el-'Al y está cerca de Hesbón.
Jahaza.
ver com. vers. 21.
Zoar.
Lugar situado en el sur de Moab, cerca de la costa del mar
Muerto, o cubierto por la extremidad sureste del mismo.
Horonaim.
Ver com. vers. 3.
También las aguas de Nimrim.
El Wadi
en Numeira, quebrada que lleva al extremo sureste del mar Muerto. El profeta
describe un grito de angustia que resuena tanto en la parte norte como la parte
sur del territorio moabita (Isa. 15: 6), es decir, en todo el país.
35. Los lugares altos.
Heb. bamah .
Originalmente, este término se empleaba para designar un cerro o una montaña
donde se celebraba un culto. Más tarde, la palabra se empleó para referirse a
montículos artificiales o plataformas, y finalmente también para las capillas
donde se adoraban los dioses. Una bamah descubierta en Gezer muestra una serie
de cuevas subterráneas, en las cuales se encontraron un altar y huesos de
hombres, mujeres y niños, y de diversos animales. Salomón erigió una bamah al
dios moabita Quemos cerca de Jerusalén (1 Rey. 11: 7). Los reyes de Israel
erigieron bamoth -plural de bamah - en todas sus ciudades (2 Rey. 17: 9). Estos
santuarios también eran comunes en Judá (1 Rey. 22: 43; 2 Rey. 15: 35; 16:4).
Fueron destruidos tanto por Ezequías (2 Rey. 18: 4) como por Josías (2 Rey. 23:
5). Jeremías desempeñó un papel importante en la reforma del tiempo de Josías.
36. Flautas.
Heb. jalil ,
literalmente, "perforado". Estos instrumentos se parecían un poco al oboe.
Muchas veces eran dobles, es decir, con una sola embocadura que tenía dos tubos
se producían notas diferentes. En las figuras, aparece siempre una mano más
distante de la boca que la otra, por lo cual puede suponerse que tocaban notas
diferentes. Estos 547 instrumentos se empleaban sobre todo en ocasiones de gozo
y de duelo. Sin duda, Jeremías se refiere a lo último. Ver la descripción del
jalil en t. III, PP. 40-41.
37. Toda
cabeza.
Raparse la cabeza y la barba y cortarse el cuerpo eran prácticas
comunes con las cuales los antiguos expresaban su dolor (Isa. 15: 2-3; Jer. 16:
6).
40. Como águila.
Se Hace
referencia aquí a Babilonia (cf. Eze. 17: 3-7).
42. Será destruido.
El exilio babilónico hizo desaparecer
prácticamente a los moabitas como nación.
43. Miedo y hoyo y lazo.
En hebreo se nota claramente la
aliteración: pájad wapájath wapaj . Esto muestra el estilo poético de esta
profecía de Jeremías (cf. Lam. 3: 47).
45. Hesbón.
Ver com. vers. 2.
Sehón.
Compárese con Núm. 21: 28. Sehón, rey de los amorreos, había tomado de
Moab el territorio que estaba al norte del río Arnón, el cual fue ocupado por
Rubén (ver com. Juec. 11: 19), y más tarde reconquistado por Moab (ver com. 2
Rey. 3: 5; t. II, PP. 86 1 862). Esa zona aquí lleva el nombre de Sehón.
Hijos revoltosos.
"Hijos del ruido" (BJ), es decir, los moabitas
(cf. Amós 2: 2).
46. Quemos.
El
dios de los moabitas (vers. 7).
47. Haré
volver.
Una promesa de esperanza, sin duda condicional (cap. 18: 9-10).
COMENTARIOS DE ELENA G. DE WHITE T4
CBA LIBRO DE JEREMÍAS CAPÍTULO 48
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