1. Respondió Jehová.
Los vers. 1-5 de este capítulo son un breve intermedio en el discurso que Dios dirigió a Job. En este momento parece como si Dios estuviera dando a Job la oportunidad de que reconociera su completa derrota.
2. ¿Es sabiduría contender?
Job ha escuchado las profundas preguntas de los caps. 38 y 39. Ahora Dios se dirige a él. ¿Podrá Job, el que contiende, que censura al Omnipotente, instruir al Dios de toda la naturaleza? En vista de las revelaciones de los dos capítulos anteriores, la respuesta que Job debe dar es evidente. Recibe un desafío directo para que defienda los esfuerzos que hace por enseñar a Dios, a quien, según Job maldeciría. El patriarca no lo hizo, por supuesto; pero sí se había equivocado al intentar decirle a Dios qué debía hacer.
Job se había mostrado muy dispuesto a debatir su caso con Dios, quien- pensaba él- no comprendía plenamente su caso. Ahora, después de presentar una nueva revelación de su divina sabiduría, Dios pregunta a Job si todavía cree que está en condiciones de presentarse ante él como demandante en un pleito.
3. Respondió Job.
Job había deseado tener una oportunidad como ésta, para exponer su caso directamente ante Dios. Y ahora le ha llegado la tan anhelada ocasión. ¿Qué haría ahora?
4. Soy vil.
En vez de decir "soy inocente", como había pensado hacerlo, replica: "soy vil". La revelación divina ha cambiado totalmente su actitud para consigo mismo y frente a Dios. Todos los que llegan a valorar debidamente a Dios, experimentan una convicción similar.
¿Qué te responderé?
El Job que había estado tan deseoso de presentar su caso delante de Dios, ahora no tiene respuesta.
Mi mano.
Cf. caps. 21: 5; 29: 9.
5. No responderé
Job reconoce la inutilidad de sus querellas.
6. Respondió Jehová.
Es evidente que Job necesitaba mayor instrucción, y desde el torbellino escucha de nuevo la voz divina. Si el propósito de Dios fuera abatir a Job, no habría necesitado decir nada más. Job ya había admitido su pequeñez y prometido callar. Pero el propósito primordial de Dios no era avergonzar a Job, sino llevarlo a una nueva experiencia.
7. Cíñete.
Ver com. cap. 38: 3.
8. ¿Invalidarás?
Dios pregunta si Job va a seguir acusándolo de no haber sido justo y equitativo, si continuará condenando la conducta divina para justificarse. Job se había acercado peligrosamente a este punto.
9. Un brazo como el de Dios.
Cf. Deut. 5: 15; 7: 19; Sal. 89: 13; Isa. 5 l: 9. Se hace ver a Job que es una necedad que condene a Dios, porque es muy débil en comparación con el Señor. Job no puede actuar ni hablar como Dios.
10. Majestad.
En este pasaje se mencionan cuatro atributos divinos: majestad, alteza, honra y hermosura (cf. Sal. 93: l; 104: 1, 2). Dios desafía a Job a que se vista con estos atributos, pues sólo entonces estaría al nivel divino para razonar de igual a igual.
11. Abátelo.
Dios exhorta a Job para que vea lo que él puede hacer con la transgresión y los transgresores.
13. Encierra sus rostros.
Posiblemente esta frase se refiera a las maneras que había de sepultar a los muertos. Para conservar las 612 momias se les cubría con vendas todo el cuerpo y también el rostro.
14. Podrá salvarte.
Cuando Job adquiera los atributos de Dios, y pueda abatir a los soberbios y a los impíos, y reducir a la tumba a los malvados, entonces Dios reconocerá que es capaz de salvarse a sí mismo.
15. Behemot.
Este nombre es la transliteración de la forma plural del sustantivo común hebreo behemah , que se traduce "bestia" " (Gén. l: 24; 36: 6), "ganado" " (Gén. l: 25) y "animal" (Gén. 8: 20), Posiblemente aquí se lo emplea como plural intensivo para referirse a un animal gigantesco. La mayoría de los eruditos piensan que se refiere al "hipopótamo" (NC); pero otros consideran que podría ser (1) el elefante, (2) alguna especie extinta, o (3) una representación simbólica.
Como a ti.
Dios había creado esa bestia y también a Job.
Hierba come.
Sin duda el "behemot" era herbívoro.
17. Como un cedro.
La delgada cola del elefante no se ajusta a esta descripción. La cola del hipopótamo es gruesa, corta y musculosa.
19. El principio.
Heb. re'shith , que puede referirse al mayor en edad o al primero en jerarquía. Sin duda se debe entender esto último.
Su espada a él se acerque.
Podría también traducirse: "El que lo hizo lo armó con su espada". Esta espada podrían ser los afilados dientes del hipopótamo, los cuales tienen fama de ser muy eficaces, tanto para comer como para defenderse. La traducción de la RVR da la impresión de que sólo el que lo hizo puede darle muerte.
20. Montes.
Los montes que están en ambas riberas del río, siempre que el "behemot" " sea el hipopótamo (ver com. vers. 15). De otro modo, se estaría describiendo una bestia que corre por los montes (ver Sal. 104: 14).
21. Sombras.
Heb. tse'elim posiblemente algún tipo de loto (BJ, NC). Es evidente que el behemot era un animal acuático.
22. Sauces.
Otro indicio de vida acuática.
23. Sale de madre el río.
La LXX traduce: "Si hubiera una inundación, él no se inmutaría"." El animal descrito no se preocupa por las inundaciones. Una indicación más de que se habla del hipopótamo.
Jordán.
Este nombre se emplea, sin duda, para representar a cualquier río grande.
24. ¿Lo tomará alguno cuando está vigilante?
El significado de la primera parte de este versículo es bastante incierto. En vista de la dificultad se han presentado, entre otras, las siguientes traducciones: "¿Lo capturará alguien, y viéndolo él, u horadará sus narices con cuerdas?" "¿Lo atrapará el cazador mientras él lo esté viendo? ¿Podrá su nariz ser traspasada con ganchos?" Esta interpretación se ciñe al contexto general, que señala la incapacidad humana para desafiar o enfrentarse a las grandes obras del Creador. La captura del hipopótamo es prácticamente imposible dentro del agua. En los antiguos monumentos egipcios se representa la captura de cocodrilos e hipopótamos.
Los vers. 1-5 de este capítulo son un breve intermedio en el discurso que Dios dirigió a Job. En este momento parece como si Dios estuviera dando a Job la oportunidad de que reconociera su completa derrota.
2. ¿Es sabiduría contender?
Job ha escuchado las profundas preguntas de los caps. 38 y 39. Ahora Dios se dirige a él. ¿Podrá Job, el que contiende, que censura al Omnipotente, instruir al Dios de toda la naturaleza? En vista de las revelaciones de los dos capítulos anteriores, la respuesta que Job debe dar es evidente. Recibe un desafío directo para que defienda los esfuerzos que hace por enseñar a Dios, a quien, según Job maldeciría. El patriarca no lo hizo, por supuesto; pero sí se había equivocado al intentar decirle a Dios qué debía hacer.
Job se había mostrado muy dispuesto a debatir su caso con Dios, quien- pensaba él- no comprendía plenamente su caso. Ahora, después de presentar una nueva revelación de su divina sabiduría, Dios pregunta a Job si todavía cree que está en condiciones de presentarse ante él como demandante en un pleito.
3. Respondió Job.
Job había deseado tener una oportunidad como ésta, para exponer su caso directamente ante Dios. Y ahora le ha llegado la tan anhelada ocasión. ¿Qué haría ahora?
4. Soy vil.
En vez de decir "soy inocente", como había pensado hacerlo, replica: "soy vil". La revelación divina ha cambiado totalmente su actitud para consigo mismo y frente a Dios. Todos los que llegan a valorar debidamente a Dios, experimentan una convicción similar.
¿Qué te responderé?
El Job que había estado tan deseoso de presentar su caso delante de Dios, ahora no tiene respuesta.
Mi mano.
Cf. caps. 21: 5; 29: 9.
5. No responderé
Job reconoce la inutilidad de sus querellas.
6. Respondió Jehová.
Es evidente que Job necesitaba mayor instrucción, y desde el torbellino escucha de nuevo la voz divina. Si el propósito de Dios fuera abatir a Job, no habría necesitado decir nada más. Job ya había admitido su pequeñez y prometido callar. Pero el propósito primordial de Dios no era avergonzar a Job, sino llevarlo a una nueva experiencia.
7. Cíñete.
Ver com. cap. 38: 3.
8. ¿Invalidarás?
Dios pregunta si Job va a seguir acusándolo de no haber sido justo y equitativo, si continuará condenando la conducta divina para justificarse. Job se había acercado peligrosamente a este punto.
9. Un brazo como el de Dios.
Cf. Deut. 5: 15; 7: 19; Sal. 89: 13; Isa. 5 l: 9. Se hace ver a Job que es una necedad que condene a Dios, porque es muy débil en comparación con el Señor. Job no puede actuar ni hablar como Dios.
10. Majestad.
En este pasaje se mencionan cuatro atributos divinos: majestad, alteza, honra y hermosura (cf. Sal. 93: l; 104: 1, 2). Dios desafía a Job a que se vista con estos atributos, pues sólo entonces estaría al nivel divino para razonar de igual a igual.
11. Abátelo.
Dios exhorta a Job para que vea lo que él puede hacer con la transgresión y los transgresores.
13. Encierra sus rostros.
Posiblemente esta frase se refiera a las maneras que había de sepultar a los muertos. Para conservar las 612 momias se les cubría con vendas todo el cuerpo y también el rostro.
14. Podrá salvarte.
Cuando Job adquiera los atributos de Dios, y pueda abatir a los soberbios y a los impíos, y reducir a la tumba a los malvados, entonces Dios reconocerá que es capaz de salvarse a sí mismo.
15. Behemot.
Este nombre es la transliteración de la forma plural del sustantivo común hebreo behemah , que se traduce "bestia" " (Gén. l: 24; 36: 6), "ganado" " (Gén. l: 25) y "animal" (Gén. 8: 20), Posiblemente aquí se lo emplea como plural intensivo para referirse a un animal gigantesco. La mayoría de los eruditos piensan que se refiere al "hipopótamo" (NC); pero otros consideran que podría ser (1) el elefante, (2) alguna especie extinta, o (3) una representación simbólica.
Como a ti.
Dios había creado esa bestia y también a Job.
Hierba come.
Sin duda el "behemot" era herbívoro.
17. Como un cedro.
La delgada cola del elefante no se ajusta a esta descripción. La cola del hipopótamo es gruesa, corta y musculosa.
19. El principio.
Heb. re'shith , que puede referirse al mayor en edad o al primero en jerarquía. Sin duda se debe entender esto último.
Su espada a él se acerque.
Podría también traducirse: "El que lo hizo lo armó con su espada". Esta espada podrían ser los afilados dientes del hipopótamo, los cuales tienen fama de ser muy eficaces, tanto para comer como para defenderse. La traducción de la RVR da la impresión de que sólo el que lo hizo puede darle muerte.
20. Montes.
Los montes que están en ambas riberas del río, siempre que el "behemot" " sea el hipopótamo (ver com. vers. 15). De otro modo, se estaría describiendo una bestia que corre por los montes (ver Sal. 104: 14).
21. Sombras.
Heb. tse'elim posiblemente algún tipo de loto (BJ, NC). Es evidente que el behemot era un animal acuático.
22. Sauces.
Otro indicio de vida acuática.
23. Sale de madre el río.
La LXX traduce: "Si hubiera una inundación, él no se inmutaría"." El animal descrito no se preocupa por las inundaciones. Una indicación más de que se habla del hipopótamo.
Jordán.
Este nombre se emplea, sin duda, para representar a cualquier río grande.
24. ¿Lo tomará alguno cuando está vigilante?
El significado de la primera parte de este versículo es bastante incierto. En vista de la dificultad se han presentado, entre otras, las siguientes traducciones: "¿Lo capturará alguien, y viéndolo él, u horadará sus narices con cuerdas?" "¿Lo atrapará el cazador mientras él lo esté viendo? ¿Podrá su nariz ser traspasada con ganchos?" Esta interpretación se ciñe al contexto general, que señala la incapacidad humana para desafiar o enfrentarse a las grandes obras del Creador. La captura del hipopótamo es prácticamente imposible dentro del agua. En los antiguos monumentos egipcios se representa la captura de cocodrilos e hipopótamos.
CBA t3
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